La quinta peor cosecha en 30 años es la esperanza para que repunten los precios de la uva y el vino
El Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) dio a conocer el segundo pronóstico de cosecha vitivinícola 2014. La caída es considerablemente mayor. A fines de enero se espera una baja en la producción a nivel país del 19%, mientras que ahora, con el segundo pronóstico en mano, la baja esperada es del 27,5% a nivel país en relación al total cosechado en 2013. Pero la baja puede ser aún mayor, teniendo en cuenta que todavía falta un mes para terminar la cosecha.
En la vendimia 2013 se cosecharon 28,66 millones de quintales, mientras que para 2014 el segundo pronóstico del INV anticipa una producción de sólo 20,95 millones de quintales. La baja es atribuida al efecto combinado de las heladas de 2013, la ola de calor de enero, el viento Zonda y las fuertes lluvias de febrero pasado.
La cantidad de uva cosechada prevista para este año asciende (por ahora) a 20,9 millones de quintales (100 kilos), lo que marca una pérdida de casi 5 millones de quintales de uva en relación al promedio de cosecha de los últimos 30 años en la Argentina. Con estos números, la vendimia 2014 apunta a ser la quinta peor de los últimos 30 años en cantidad de uva cosechada, informan desde el INV.
A valores actuales, se estima que la pérdida de unos 5 millones de quintales de uva en relación a la cosecha media de los últimos 30 años tiene un impacto que va de los $1.100 a los $1.500 millones.
Sólo en Mendoza, es espera este año un baja en la cosecha de uvas del 27%, lo que en cantidad representa una pérdida de poco más de 5 millones de quintales. En San Juan la caída es mucho mayor, ya que se espera una cosecha 30% menor a la del 2013.
Y la situación puede ser aún peor, admiten los técnicos del INV. Todavía queda un mes más de cosecha debido a que las intensas lluvias de febrero, por lo que aún hay margen de tiempo como para que se den nuevos accidentes climáticos (más lluvias o granizo) y para que se registren casos de podredumbre y otras enfermedades en la vid. Es por ello que desde el INV confirmaron que a mediados de marzo se actualizará por tercera vez en el año el pronóstico de cosecha, al tiempo que ratificaron para el 1 de junio la fecha de liberación de los vinos 2014.
En cuanto al grado alcohólico, desde el INV Claudia Quini buscó llevar tranquilidad a los productores al señalar que el grado alcohólico no lo fija nadie. “El grado alcohólico es el que tiene la uva al final de la cosecha”, explicó.
Stocks y precios
Una caída del 27,5% en la producción de uva necesariamente impactará sobre el volumen total de vinos producido este año. Y es a este juego de “oferta y demanda” al que apuestan tanto el INV como el Gobierno de Mendoza en la pulseada por tonificar los precios de mercado de la uva y el vino para el 2014.
“Estamos frente a la quinta peor cosecha de uva de los últimos 30 años y puede ser peor aún”, admitió Guillermo García, presidente del INV, antes de señalar que con estos 20,9 millones de quintales de uva se va a llegar a la liberación de vinos de junio de 2014 con sólo tres meses de despachos como stock acumulado. “Un nivel muy acotado de existencias”, señaló el funcionario.
Al ser consultado sobre el impacto esperado en los precios de la uva y el vino de esta fuerte caída en la producción (oferta), al ministro de Agroindustria de Mendoza, Marcelo Barg, confirmó que confían en que los precios suban. Y si esto no se da, insistirán con las intervenciones en el mercado por parte del Estado.
“El manual indica que una menor oferta (de uvas y vino) tendría que impactar sobre los precios y hacerlos subir. Pero esto no sucede en muchos casos. Y es el Estado que debe intervenir ante las ‘fallas de mercado’. Nosotros ya veníamos anunciando la fuerte baja en la producción de uva por efecto climático y hoy estamos frente a una de las peores cosechas de los últimos 30 años y con un stock de vinos súper ajustado (tres meses a junio de 2014)”, explicó Barg, antes de señalar que, por otro lado,los despachos al consumo interno siguen subiendo en volumen (+1,47%) y aumentaron las exportaciones de vinos (+2,64%) y mosto (+25%) en enero.
Es, en consecuencia, este efecto combinado de menor producción de uva en tiempos de devaluación con recuperación de ciertas ventajas en el tipo de cambio, más crecimiento en los despachos de vino al mercado interno y más exportaciones, lo que hace especular con que la quinta peor cosecha de uva de los últimos 30 años haga que los precios se fortalezcan.
De todos modos, desde el Gobierno volvieron a insistir en que sin los precios no se mueven como esperan los productores, se saldrá como está anunciado a comprar uva para mosto, vino y a entregar créditos para retención de stocks.
El efecto devaluación dio resultado: suben los despachos y exportaciones vitivinícolas en enero
La comercialización total de vinos cerró enero con una suba interanual del 3,26% en volumen. Crecieron los despachos al mercado interno 1,47% en cantidad y las exportaciones subieron 2,64%. Los envíos a destilerías subieron 630%. Las ventas de mosto subieron 25%.
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